La mayoría de aficionados tienen a Lavinia como una de las tiendas de vinos de referencia de Madrid, pero raramente piensan en su restaurante, situado en el piso superior del establecimiento. El gran aliciente es contar con la que debe ser la carta de vinos más variada y extensa de la ciudad, ya que es posible acompañar la comida con cualquier botella a la venta en la tienda y además (y esta es otra razón de peso) a precio de tienda y sin recargo por el descorche.
Estamos hablando de unas 4.500 referencias con un 40% de vinos extranjeros, selecciones destacadas de vinos franceses, muy en especial de Champagne y buena representación de vinos de países europeos y del Nuevo Mundo. En el apartado nacional, siempre es interesante buscar vinos de pequeños productores que Lavinia distribuye prácticamente en exclusiva en Madrid o marcas de elaboradores de prestigio que elaboran etiquetas ad hoc para la tienda. Desde que el periodista y gastrónomo Juan Manuel Bellver se hiciera cargo de la dirección general en 2014, la búsqueda de vinos curiosos y alternativos parece estar asegurada.
Después de triunfar en el restaurante de Aranjuez Casa José con su cocina basada en productos locales, Fernando del Cerro se incorporó a Lavinia en abril de 2015. Como era de esperar, se sigue apoyada en las verduras, pero en lugar de recurrir a los acompañamientos de distintos tipos de grasa que caracterizaban su trabajo anterior, ofrece ahora una cocina muy fresca y sutil que deja mucho espacio para el vino. Sus propuestas aparentemente ligeras y llenas de sabor permiten alargar el menú y resultan muy versátiles para ser acompañadas de una amplia gama de vinos. "Lavinia Times" es la nueva e informal carta con apariencia de periódico que incluye recetas, información sobre alguno de los proveedores del restaurante y la agenda mensual de catas y eventos de la tienda. También está por supuesto la detallada lista de vinos por copas que cambia mensualmente con una sección dedicada a propuestas servidas con Coravin, el fascinante artilugio inventado por el norteamericano Greg Lambrecht para servir el vino sin descorchar la botella.
Cualquier amante del vino se sentirá aquí a sus anchas, más aún teniendo en cuenta el alto nivel de los sumilleres de Lavinia. En el restaurante, en concreto, están la encantadora Belén Salvador y la jovencísima Pilar Cavero, Mejor Sumiller de España 2013, y recién llegada del Celler de Can Roca.
El restaurante abre los mediodías de lunes a sábado y sirve cenas sólo los jueves y viernes. Se puede comer a la carta u optar por un menú degustación que cuesta 55 €. Se ofrece además dos opciones de menús maridados con vinos de pequeños productores (75 €) o vinos premium (95 €). No es barato, pero la experiencia puede ser muy gratificante. Y siempre queda la opción de pedir un par de platos y la botella que más le apetezca a uno de toda la tienda. A.C.
